En cualquier libro de ciencias naturales o enciclopedia podremos consultar las etapas de desarrollo del ser vivo, éstas son: nace, crece, se reproduce y muere. Sin embargo, estudios recientes llevados a cabo por mí mismo, concluyen que los seres vivos tienen una etapa fundamental y repetitiva que le acompaña a lo largo de todo su desarrollo: consume. Las etapas quedarían de la siguiente manera - según mi estudio ¿eh?: consume (compra el carrito modelo Ferrari plus con ruedas 4x4, ropa de todos los tamaños hasta que cumpla un año, juguetes que cubran al menos sus doce primeros meses de vida), nace, consume, crece, consume, se reproduce (si se da el caso), consume, muere, consume (sí, el funeral es "un palo", que si te tienen que maquillar, vestir, te compran una caja de pino macizo, te buscan un hueco donde ponerla). Y digo que es una etapa vital fundamental porque analizando el impacto en nuestra sociedad, en nuestro mundo actual, si toda las personas dejáramos de consumir, sería sencillamente nefasto.
Si te quedas un instante, sólo un instante, parado desde lo alto de un edificio del centro de Madrid, ves gente y gente pasar de un lado a otro, cual pollo sin cabeza y no dejo de pensar ¿hacia dónde vamos? ¿el consumo da la felicidad? y sigo pensando lo mismo, que la felicidad está en las cosas pequeñas, en las cosas sencillas. Siento preocupación por las generaciones venideras, a las que estamos enseñando que o consumes o no serás feliz, cuando lo verdaderamente importante es el cariño de las personas cercanas, con las que convives, y con las que te cruzas cada día. Las cosas materiales ocupan un lugar importante en nuestras vidas, pero si basas la felicidad sólo en ellas, estás perdido amigo.
Un saludo.
