Siempre que veo a parejas mayores compartiendo todavía experiencias, me entra mucha envidia y un mismo pensamiento: "yo también quiero". La vida pasa más rápido de lo que pensamos, cuando te das cuenta cumples los cuarenta y empiezas a echar ligeras miradillas hacía atrás, intentando verificar si estás viviendo la vida que quieres y de la manera que quieres, o si estás muy lejos del camino. Ojalá dentro de unos cuantos años me vea como estas parejas, que siguen caminando juntos en la vida; felices y orgullosos de todas las cosas vividas, y alegres por todas las que todavía les quedan por vivir, JUNTOS.
© Miguel Ángel Santos Hidalgo